Thursday, November 3, 2022

LA NOSTALGIA

 

LA  NOSTALGIA

de Xiomara J. Pages



© Copyright, Octubre 25,  2022

 

Nací en la Isla de Cuba, y por razones políticas vine de jovencita a vivir a los Estados Unidos de América.  He vivido muchos más años en este país que en mi tierra natal, pero no la olvido.   Uno no deja de amar a un primer hijo, por tener un segundo o un tercero,  los ama a todos por igual..... Aquí  experimentamos a veces,  con el pasar de los años una nostalgia donde nos asaltan las caras de familiares y amigos que ya murieron y no volvimos a ver,  y los recuerdos que nos hacen  vivir de nuevo aquellas experiencias con ellos....  Por eso los cubanos en Miami,  presentan anualmente una exhibición llamada,   CUBA NOSTALGIA,   de mementos y parafernalia de  aquella época de nuestra niñez y juventud  cuando Cuba  era una república democrática,  o aún después, viviendo  de las memorias de nuestras vidas.  Pero hay muchas  clases de Nostalgia. 

 

* * *

Investigando sobre este tema, hojeando libros, y leyendo sitios-web, trataré de resumir todo lo encontrado y aprendido sobre la NOSTALGIA.   Un poco de paciencia para que lean todo lo que resultó de mi búsqueda.

 

La palabra "Nostalgia" fue creada por médicos suizos a finales del Siglo XVII, describiendo la añoranza por el hogar que sintieron los soldados. Pero la nostalgia es mucho más que añorar  el hogar, y en exageración se  puede convertir demasiado  melosa.    Sin embargo, ella cumple una función más allá del sentimentalismo.  

 

NOSTALGIA es un sentimiento de pena por la lejanía, la ausencia, la privación o  la pérdida de alguien o algo,  que nos han sido queridos.  Es pensar en el pasado, en un período de tiempo  o en un lugar que vivimos,  sentir  añoranza.  

 

“La nostalgia hoy en día puede definirse como un sentimiento de pena o tristeza que se experimenta al recordar un momento, persona o lugar que nos ha hecho feliz en el pasado, y que actualmente ya no forma parte de nuestra vida.''

 

La nostalgia  es  un sentimiento de tristeza que nos inunda en cualquier momento de nuestras vidas,  al recordar.    Esa  nostalgia  es como un escaparate donde guardamos emociones positivas de  nuestra  memoria, y lo abrimos conscientemente, nos refuerza emociones y el pasado nos sirve como referencia para un mejor futuro.  Ese pasado, dicen otros autores, es como un país que dejamos atrás, del cual somos exiliados, y como en cualquier exilio,  añoramos volver  allí  de vez en cuando.  A  ese anhelo se le llama Nostalgia.

 

Una foto,  por ejemplo,  puede  hacernos recordar, un primer beso,  o la niñez de nuestros hijos;  algo que se dijo;  un momento especial;  algo valioso que tuvimos,  y que  nunca olvidaremos.  La nostalgia evoca un sentido especial de tiempo o lugar. Nos da  una sensación  agridulce, por lo que ya no está o  por los que ya se fueron.   

 

Existen estudios hechos  por el psicólogo griego, Dr. Constantine Sedikides, Profesor de  Psicología Social y de la Personalidad, y Director del Centro de Investigaciones de la Identidad en la Universidad de SouthHampton, en el Reino Unido.  Ha enseñado en la Universidad de Wisconsin-Madison, y  en la Universidad de North Carolina en Chapel Hill, ambas en EEUU.  tiene un post grado, un Ph.D. de la Ohio State University de EEUU y un B.A. de la Universidad de Aristóteles de Thessaloniki, Grecia en 1982.    Sedikides  nos explica que la nostalgia nos sirve para conectarnos con otras personas y eventos, y nos ayuda a continuar con menos miedo, y con una meta mucha más clara.   El se inspiró en la llamada Teoría del Manejo del Terror (TMT), que plantea la necesidad primaria del ser humano de enfrentarse al inevitable hecho de la propia muerte.    Estas conclusiones están basadas en la tradición psico-analítica de Sigmund Freud. 

 

Aquí  les  copio lo explicado  verbalmente,  sobre esta teoría de  TMT (copiado de la internet y de los estudios de Dr. Sedikides):   

Los experimentos publicados en el año 2008 utilizaron un método estándar para probar la TMT:  se les pedía a los participantes que pensaran en su propia muerte y que respondieran preguntas como:  'Describa brevemente los sentimientos que le surgen al pensar en su propia muerte'.     Mientras que al grupo de control se le solicitó pensar en el dolor dental, que  si bien no es una sensación placentera, no es una amenaza para la vida.

La TMT sugiere que como respuesta al pensamiento de la muerte, las personas se aferran más a la idea de que la vida tiene un significado más amplio, por lo que luego de sus intervenciones, los participantes tuvieron que señalar si estaban de acuerdo con frases como: "La vida no tiene sentido ni propósito",  o   "Todos los esfuerzos en la vida son inútiles y absurdos".

A partir de las respuestas, los participantes fueron clasificados según una escala que representaba con cuánta fuerza pensaban que la vida tiene un significado. Las respuestas variaron según el grado de nostalgia de las personas.   Los investigadores descubrieron que sólo los participantes que dijeron ser menos propensos a tener nostalgia, experimentaron un aumento del sentimiento de falta de sentido en la vida cuando se les pidió que pensaran en su propia muerte.   Mientras que aquellas personas que dijeron ser más propensas a tener pensamientos nostálgicos -en comparación con la media-  no se vieron afectadas por pensamientos negativos sobre su mortalidad. Al igual que el grupo de control, consideraron que la vida tiene un gran sentido.

Cuando hicieron un seguimiento de  dichos  experimentos, los expertos determinaron que las personas más propensas a la nostalgia tenían con menos frecuencia pensamientos persistentes sobre la muerte. Además, eran menos vulnerables a los sentimientos de soledad, porque los llenan con recuerdos.

* * *

Por lo tanto, la nostalgia difiere mucho de la debilidad o la indulgencia. Los investigadores la llaman un "recurso para dar significado", una parte vital de la salud  mental.   No podemos vivir siempre en el pasado, pero recordar con nostalgia de vez en cuando,  ayuda la salud mental.

 

El término  NOSTALGIA  proviene del griego “Nostos” el cual significa “regreso a casa”, y se  combina  con "algos" que significa dolor.     Fue acuñada por primera vez por el suizo Johannes Hofer en 1688 para describir lo que sentían los soldados al estar fuera de su hogar. “La nostalgia hoy en día puede definirse como un sentimiento de pena o tristeza que se experimenta al recordar un momento, persona o lugar que nos ha hecho feliz en el pasado, y que actualmente ya no forma parte de nuestra vida. ''

 


Sentimos nostalgia cuando acaban las vacaciones y regresamos a casa, luego de haber pasado unos días amenos.   Y esta tristeza se hace cada vez más frecuente, pues  hoy día,  vivimos   la vida  muy  apresuradamente.

 

 “En estos tiempos en los que tanto ha cambiado nuestra vida, todos hemos sentido nostalgias de muchas cosas. Nostalgia de los sitios a los que íbamos, de las personas que formaban parte de nuestra vida cotidiana, los sabores de las comidas que hace tiempo que no saboreamos… Y también pequeñas y curiosas nostalgias, extrañezas de los gestos que tenemos limitados, de los abrazos, de la cercanía. Atravesamos un tiempo en el que lo que no sabíamos que nos importaba tanto, ha cobrado  protagonismo”,    así nos señala, la Dra.  Anabel González, psiquiatra española  y autora del libro,   ''Las cicatrices no duelen.''  (Planeta).

 

También podemos sentir nostalgia por  lugares, por  relaciones pasadas en  otras etapas  de nuestra vida en las que hacíamos cosas diferentes o incluso éramos distintos de cómo somos ahora.  ¿Es un error mirar demasiado hacia el pasado? Algunos psicólogos  alertan sobre este  peligro, puesto que demasiada nostalgia podría ser una forma de evadirse de la realidad, un indicativo de soledad o incluso de que tenemos alguna dificultad para lidiar con el presente.

 

“La nostalgia no nos lleva en sí a  una falta de capacidad de disfrutar del presente, [la falta de energía o a tristeza constantes, ya son de estados depresivos].   De hecho, podemos estar profundamente deprimidos, sin que necesariamente echemos de menos nada o a  nadie”,  aclara en este sentido la Dra. Anabel González.

 

Numerosos estudios científicos han llegado a la sorprendente conclusión de que, a pesar de que a menudo se la relacione con la tristeza, y haya quien la confunda con depresión, este sentimiento agridulce tiene una función positiva, ya que puede contribuir a mejorar nuestra salud mental.

 

La nostalgia, la verdadera nostalgia, no nos  congela o nos ancla en el pasado, al contrario,  nos puede servir para levantar el ánimo y aumentar la vitalidad.  Nos puede  fortalecer el sentido de la  propia identidad y hacernos sentir más optimistas e inspirados, según investigaciones de la Universidades  de Southampton  (Inglaterra),  Surrey  (comunidad global  de más de 16,000 estudiantes de 140 países cerca de Londres),  y Le Moyne  (College privado Jesuita en Syracuse, New York).   No es tanto el  hecho de regresar al pasado, sino que en general  lo usamos  sin darnos cuenta como un instrumento de auto-descubrimiento.

 

Al  recrear los recuerdos con la nostalgia, entenderemos mejor quiénes somos hoy.  Y esto sucede en el  presente, ayudándonos  a  reaccionar  a situaciones que nos cuesta trabajo vivir o transitar.   Esos recuerdos felices, nos dan un respiro, una pausa  a lo negativo.  La nostalgia sería entonces una respuesta psicológica de refuerzo  frente a un obstáculo o problema.

 

La psicóloga española, Dra. Silvia Moreno, de  ''MundoPsicólogos,''  nos explica que es habitual sentir nostalgia cuando abandonamos el  hogar familiar y nos independizamos  o  nos  casamos,  cuando perdemos a un ser querido, o cuando pasamos por una situación difícil.   Ella asegura que es un sentimiento universal: 

 

“Sus características han demostrado ser idénticas en cualquier parte del mundo, y los temas suelen ser los mismos en cualquiera de las culturas: reminiscencias sobre amigos y familiares, cumpleaños, bodas, canciones, vacaciones, y momentos importantes en la vida de las personas. Se ha encontrado que incluso los niños de siete años recordaban con nostalgia experiencias como sus cumpleaños pasados o vacaciones”.

 

Cuando compartimos nuestros recuerdos y nostalgia con hijos y nietos, con otros niños y jóvenes, la nostalgia resulta positiva, y  por eso decimos, que  'Recordar es Volver a Vivir,'  sin lugar a dudas.   Y es que los niños y jóvenes están en transición hacia una edad de adultos, y tratan de saber de dónde vienen, quiénes son, y cuál es el propósito de sus vidas y quieren conocer a dónde pertenecen en la familia.  Es por eso que la nostalgia, lejos de ser algo negativo, según los expertos, es una de las fórmulas más potentes para crear nuestra propia  identidad.  Y aprendemos a valorar la importancia de cosas de nuestra historia que ahora no tenemos.  "Nada de esto es un problema, al contrario, nos ayuda a ver lo que realmente importa,"  nos dice la Dr. Moreno.

 

El problema viene cuando queremos quedarnos a vivir en esa nostalgia. Si nos pasamos la vida mirando hacia atrás y lo convertimos en nuestra forma de estar en el mundo, seremos entonces personas en constante conflicto con la realidad, que ya no se parece a la de otras etapas u otros lugares. Es lo que sucede, por ejemplo, cuando alguien se muda a otro país pero realmente no vive en él, sino que mentalmente sigue en otro lugar y cada vez que “baja” a su mundo presente lo compara con el anterior, sin darle ninguna oportunidad al nuevo espacio al nuevo país.

 

Hay  SEIS  (6)  virtudes que nos regala la Nostalgia, según la Dr. Silvia Moreno:

 

1 .-  Nos hace aferrarnos más a la vida y darle un sentido. Saber que la vida            puede              volver a regalarnos momentos tan felices como aquellos vividos en el             pasado,  nos ayuda  a seguir adelante. Además, recordar cómo fuimos y         compararlo con cómo somos  ahora , puede darnos un sentido de identidad          y  de continuidad que nos guía en las nuevas experiencias.

 

2 .-  Nos ayuda a afrontar mejor el futuro. La nostalgia nos prepara para vivir        experiencias similares a las vividas en el pasado, y nos ayuda a tener una        visión optimista del futuro, esperando que el resultado de estas nuevas experiencias sea tan positivo como el de antaño.

 

3.- Nos motiva a seguir adelante. Recordar las situaciones que superamos satisfactoriamente en el pasado y saber que podemos usar las mismas      estrategias en un futuro para superar otras situaciones que se nos      presenten nos hace sentirnos fuertes y seguros.

 

4 .-  Contrarresta las emociones negativas. A veces, cuando estamos pasando por           un momento difícil en nuestra vida, revivir momentos felices del pasado (siempre que no nos dejemos arrastrar por ellos) nos puede ayudar a     sentirnos más alegres y optimistas y a contrarrestar los pensamientos             negativos que nos asaltan.

 

5.-  Nos enseña a valorar más el aquí y ahora. Saber que quizás en un futuro         recordemos estos momentos con nostalgia nos hace querer vivirlos más        plenamente y aprovechar al máximo cada momento feliz en el presente.

 

6 .-  Fortalece las relaciones sociales. La nostalgia hace que recordemos los           momentos positivos y dejemos a un lado los negativos, por lo que puede    alentar a dos personas que hace tiempo que no hablaban a querer retomar    la  relación, ya sea de amistad, de pareja, o familiar, queriendo revivir   aquellos  bonitos momentos del pasado.

 

Además, gracias a la Nostalgia, numerosos escritores, poetas y artistas, encuentran su fuente de  inspiración en ella,  ya  que es un sentimiento capaz de convertir  en oro incluso los momentos  más ordinarios.   “La nostalgia, en general, tiene  una  tonalidad desagradable,  aunque muchas veces podemos deleitarnos en ella”    señala la  Dra. Anabel González,  autora  además  del libro,  "Lo Bueno de Tener un Mal  Día"    y continúa: “Nos dejamos sumergir en la ensoñación de otro tiempo, otro lugar, otras relaciones, y durante un breve tiempo las sensaciones positivas asociadas  vienen. ''  

 


 

''Sin embargo, el riesgo es que nos dificulte sacarle partido a lo que sí tenemos.  Las emociones negativas nos mueven a hacer cambios, y en este sentido la nostalgia nos lleva a buscar aquello que era importante para nosotros y que ahora no tenemos.  La nostalgia productiva es una visita a tiempos, lugares y relaciones mejores  que nos dice que podemos tener lo que necesitamos, que en otro momento y lugar estuvo ahí,  y por tanto, de un modo u otro, podemos volver a tenerlo” ,   concluye.

 


Cuando sentimos Nostalgia, cuando recordamos la música o canciones que escuchamos de niños con nuestras madres, o la que bailamos de jóvenes, enseguida hacemos una conexión en nuestra mente que  se riega por todo el cuerpo, y aunque tengamos ya años de vejez, volvemos a sonreír y a  tararear esas canciones y sentimos el corazón  joven  con las mismas sensaciones de entonces.    Volvemos a vivir como si estuvieran vivos  nuestros abuelos y padres.  Por eso dicen con mucha razón que solo muere el que nunca es recordado.

 

Cuando recordamos el café con leche que nos preparaba nuestra madre, ningún otro nos sabrá igual que aquél,  porque nuestra memoria recuerda  con nuestros cinco sentidos,  como  lo explicaba  la autora americana, la Dra. Diane  Ackerman  en su libro,  ''La Historia Natural de los  Sentidos.''   (libro que leí dos veces, pues es magnífico y lo recomiendo siempre).

 


La Nostalgia está  a nuestro favor, si sabemos aprovecharla,  viviendo el presente que  es lo que tenemos hoy,  y nos  servirá para el futuro,  recordando todo lo que hemos  podido disfrutar,  y los logros  que hemos ya alcanzado, dándonos vigor para seguir adelante y venciendo metas.

No comments:

Post a Comment