"Las Mujeres son de Venus, y los teatristas son de....???" de Xiomara J. Pagés

"Las Mujeres son de Venus, y los teatristas son de....???"

de Xiomara J. Pagés

www.xiomarapages.com

(Xiomara's News): http://xiomaraopina.blogspot.com/

Abril 7, 2012

" Considero que un periodista que se respete, no participa de concursos de popularidad, sino que debe compartir sus experiencias con sinceridad, sin favoritismos con nadie, para aprender y enriquecernos todos, teatristas y asistentes, y lograr un producto mucho mejor."

Miami definitivamente está creciendo en arte y cultura, y como digo siempre, esto me alegra mucho, ya que llevo años apoyando todo esfuerzo que se realice en nuestra ciudad, con ese fin. Basta con asistir a cualquiera de las pequeñas salas, no solo a los grandes teatros o eventos mucho más caros, sobre todo en estos momentos de crisis financiera , y verlos presentar sus dramas y comedias, conciertos de música, teatro minimalista, incluso en un café, restaurant, o bar, para atraer al público.

En lo que va de 2012, mencionaré algunas obras a las que he asistido. La cantante cubana Tania Martí, directora de Martí Productions (http://www.martiproductions.net/) me invitó a presenciar una elegante comedia cargada de chistes, enredos y alegría, en el Teatro Manuel Artime con un magnífico elenco en "Los Cuchillos de Atarés." Acostumbrados ya a sus magníficos conciertos , fue agradable ver esta obra, y recordar las viejas comedias de la Cuba de ayer, que tanto gustaban a mis padres.

Invitada por la dramaturga, Julie de Grandy, asistí a varias obras en el Teatro Havanafama (http://www.havanafama.com/ ) durante el XI Festival Latinoamericano del Monólogo, entre ellas, "Alguien Borra la Ciudad" (Maikel Chávez, autor y actor) y "Sirenas" (de la misma De Grandy con la magnífica interpretación de Belkis Proenza) . También De Grandy me invitó como miembro de prensa, a ver algo muy diferente, un teatro innovador moderno, traído desde España al Downtown de Miami, en el Centro Cultural Español (http://ccemiami.org/) inaugurando el 28 de Marzo, lo que se conoce como Microteatro Miami. Las pequeñas obras teatrales en Inglés y en Español, de 15 minutos de duración dentro de cada uno de los nueve contenedores o vagones, para 15 personas, me fascinaron grandemente. (http://www.teatroenmiami.net/index.php/articulos-teatro/6524-micro-teatro-miami).

Asistí apenas la semana pasada al Teatro Ocho, (http://www.teatro8.com/) a ver la obra "Arpías" (con las actrices Marta Velasco e Isabel Moreno, dirigida por el dramaturgo Marcos Casanova), una tragicomedia que nos mantuvo por una hora y media sin intermedio, al borde de nuestras butacas entre risas y suspenso.

A pesar que la nueva moda es de presentar obras con vocablos fuertes, éstos fueron utilizados en todas estas puestas, en momentos precisos y necesarios, dándoles énfasis a los diálogos o parlamentos de los actores sin ofender a la audiencia.

Sin embargo, la experiencia de anoche en Teatro para Todos, "El Bar" (http://teatroparatodos.net/web/ ), fue muy diferente. Hablaré no sólo de la obra, "Las Mujeres son de Venus, y los Hombres son de... Madre", sino de la experiencia completa de la noche. Considero que un periodista que se respete, no participa de concursos de popularidad, sino que debe compartir sus experiencias con sinceridad, para aprender y enriquecernos todos, teatristas y asistentes, y lograr un producto mucho mejor.

Es sabido, que algunos teatristas, se quedan en la creatividad. No escuchan sugerencias ni consejos sinceros, y en ocasiones, olvidan o carecen del sentido de negocio, publicidad , y mercadeo (no solo bastan los conocimientos de teatro), para realizar una obra o evento. Y en muchos casos, la arrogancia o la terquedad, llevan al fracaso, o comprometen el éxito de lo que hubiese sido una buena puesta en escena, derrotando el propósito.

La comedia tan simpática , "Las Mujeres son de Venus, y los Hombres son de Madre", la fui a ver hace casi tres años atrás. Actuaron entonces, los incomparables actores colombianos Marisol Correa y Leandro Fernández. Al saber que se presentaría de nuevo en "El Bar" del "Teatro para Todos" (3119 Coral Way), llamé para hacer reservaciones y llevar a una amiga por su cumpleaños. Me atendió al teléfono, Angela María Osorio, quien me informó que Marisol Correa ya no trabajaba con ellos, y los actores serían esta vez el mismo Leandro Fernández pero con la venezolana Mónica Pasqualotto, y que no tenían entradas de cortesía para la prensa, ni siquiera precios para Senior Citizens. Quería que mi amiga viera esta obra, y asi contribuiría de todos modos al teatro. El precio era de $ 20. por persona y en efectivo. Luego se me informó que habría un consumo mínimo de aperitivos y bebida, de $ 15. por persona. Ya esto resultaba caro y dispendioso para mi presupuesto, pero mi amiga y yo decidimos comer antes de irnos al teatro, y únicamente degustar algunos hor d'oeuvre. Yo pagaría las entradas, ella se brindó a pagar el consumo en el bar.

Llegamos temprano, y tuvimos que esperar a que abrieran la puerta. Pagué entusiasmada las entradas, y nos sentamos en una mesita tan pequeñita y frágil como esas que utilizo para comer frente al televisor, solo que ésta parecía bailar y amenazaba con caerse a cada instante. Las sillas eran incomodísimas, situadas en el peor lugar para poder ver el show. Pedimos algo de tomar y comer. Se nos ofreció una jarra de cerveza por los $30. requeridos ya que habíamos cenado. Pensamos era demasiado y así lo expresamos, entonces la propia Angela María Osorio, vino al llamado poco profesional de su mesero, que le explicaba: "We have a problem." La Sra. Osorio resolvió rápidamente el "problema" ofreciéndonos una bandejita mixta de quesos, frutas, zanahorias, prosciutto y chorizos cantimpalo, con palitos para picar y una copa de sangría a cada una por el valor de los $ 30. Mi amiga y yo comemos ligero siempre, pero lo que más abundaba en el plato eran los pedacitos de queso, el resto había que saber pescar y compartirlo entre las dos, a raciones de gotero. Al terminar de beber la sangría, pedimos agua. El camarero sólo nos ofreció la embotellada, que por supuesto se cobra aparte. Le dijimos que queríamos agua corriente en un vaso. Nos cansamos de esperarla. Resignadas pedimos entonces una botella de agua. Ésta si la trajeron de inmediato ( al parecer así son instruídos), y estaba a temperatura ambiente casi tibia, sin vasos ni hielo, era como tomarse un caldo de agua. Y de paso, la compartimos entre las dos, y la echamos dentro de las copas vacías de sangría para poder beberla. Antes habíamos pedido una cucharita para comernos las frutas de lata que quedaban en la copa, pero al no traerlas, nos dedicamos a cazar con uno de los palillos los pequeños trocitos.

Finalmente, comenzó el show mucho más tarde de lo anunciado, pues ellos tratan que los asistentes coman, beban, y consuman antes de comenzar, evitando que los meseros estén interrumpiendo con el ir y venir. El escenario no era como yo lo recordaba, éste era minimalista. La Sra. Osorio habló de la trayectoria de " El Bar", que lleva poco más de dos años de creado, que cuentan con el apoyo de Mega TV y de Radio Caracol y otros medios, que dan conciertos de música los Jueves, que han presentado a grandes artistas, entre ellos mi amigo, el comendiante colombiano Saulo García (La Vida en los EsCLAVos Unidos http://saulogarcia.net/humor/ ), entre otros no menos importantes, y que también se renta el local para fiestas particulares.

Los actores estuvieron muy bien, sobre todo Leandro Fernández que me parece genial. Mónica Pasqualotto no lo hizo mal tampoco, aunque sin ánimos de ofender, preferiría en ese papel a Marisol Correa. Se dijeron algunas vulgaridades que me parecieron fuera de lugar, no eran necesarias para el triunfo de la noche, y que jamás escuché en la obra original, incluso alguna que otra respuesta de parte de la actriz a personas del público que sonaron inapropiadas. Creo en la comedia que me hace reír, con buen gusto, que no falte a mi dignidad como persona o a mi inteligencia. Pero bueno, hay público para todo, y uno atrae precisamente el que desea según lo que presenta. En mi caso, veo poca televisión ya que soy muy selectiva. Percibí que la mayoría va allí a divertirse, entre copas y amigos, que cuentan con dinero para poder pagar y no a prestar mucha atención a la calidad del show que van a presenciar. Al menos esa fue mi impresión de anoche, y yo iba por primera vez, no tengo otras experiencias del lugar para poder comparar, y tal vez no siempre sea así.

Al concluir el show, entre aplausos, recibían a la cantante colombiana Paola Fernández. Ya para entonces era casi medianoche, y mi amiga estaba cansada. Pedimos la cuenta del consumo, y se nos entregó un monto o importe de $ 45. a lo que nosotras protestamos de nuevo. El mesero nos explicó que estaba incluída la botella de agua, además del consumo mínimo de $30. de ambas, más el impuesto y la propina (20% obligatoria, cuando generalmente en estos casos se cobra de un 10 a un 15%. En Costa Rica, por ejemplo, país que conozco bien entre otros donde he viajado, generalmente se suma a la cuenta, un 10 a 15% obligatoriamente). Si el consumo fue de $ 30. , una propina de 20% sería, de $ 6. Esto suma un total de $ 36. El impuesto o tax de $ 30. es de apenas poco más de $ 2. Calculen ustedes el costo de la botella de agua. Menos mal que trajimos un poco de dinero extra en efectivo, si no, hubiéramos tenido que limpiar el piso al final de la noche.

Es una pena, repito, que los teatristas que presentan estos eventos no conozcan más sobre mercadeo y relaciones públicas, y a la vez, comercialicen tan abusivamente con el arte, sin considerar la crisis económica que todos vivimos, ni el gasto de gasolina tan solo para llegar allí.