Confesión a mi hijo Franky

Confesión a mi hijo Franky 
para mi hijo mayor

Agosto 27, 2016

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Querido hijo:

Te he observado todos estos días  desde que nació tu segundo  hijito Franco y  estuvo  más de una semana  en el N-ICU hasta que  todo estuvo bien para salir a la casa.   

 También desde que nació tu primera hijita Bianca, ya hoy con  5 años y medio,  y veo como la amas y  la educas.

Para mí, yo tuve el mejor padre del mundo, mi hermana y yo fuimos siempre las niñas de sus ojos.    


           Mi padre...
 
Tu padre, no ha sido mal padre y tienen lindos recuerdos,  pero jamás  NI  mi padre,  NI  tu padre,  realizaron cada una de las labores  que te he visto a tí  hacer...

La Familia en París.
 Cambiarlos  de pañales (mi padre si hizo eso,  tu padre no);  estar en el hospital con la madre de tus hijos a su lado y atender a los bebitos;  

darles la leche o comida;  bañarlos;  jugar  tanto con ellos (tu padre si lo hizo con tu hermano y contigo, mi padre pocas veces, aunque conversamos mucho y aprendí mucho con él);   cargarlos,  acunarlos, pasar malas noches con ellos.




Tu  con  tu hijita Bianca                                               con Franco

Hoy pensando en todo esto, tenía que decírtelo hijo mío, y no me importa que muchos lo sepan, lo grito al mundo...Expresar sentimientos sinceros y lindos  debe ser escuchado por muchos, que no lo pueden a veces manifestar, y es tan enriquecedor para los que lo sentimos y  decimos como para todo el que lo escucha o lee... Nos hace reflexionar y nos hace Humanos.

Te amo entrañablemente porque eres mi hijo, el mayor, el que me hizo MADRE por primera vez....  pero también te admiro como ser humano,  con tus  virtudes y tus fallas....

te  amo como nadie en este mundo jamás te amará,  por ser eso, Tu Madre....pero además,  por tus sentimientos, por todo lo que has dicho en estos días a pesar del dolor, por  amar al prójimo y tratar de ayudar a pesar de estar sufriendo lo tuyo;  por preocuparte por otros bebitos enfermos alli y otras madres y padres y ayudar siempre;   por esa confianza en el Dios que te presentamos  desde  tu Bautismo...  precisamente en la Iglesia de St. Michael, el Arcangel  que lucha contra el mal, el patrono de los policías,  y al que yo oraba cuando patrullabas en las calles arriesgando tu vida por la de los demás;   porque  amas y confías en ese Dios al que te enseñé  a amar,  y  te enseñé  a orarle... y al  que  has acudido en tus caídas y dolores.  

Porque cuando niño me ayudaste a cuidar de tus hermanitos más chicos, porque hiciste muchas cosas por tu hermanita enferma Sandra, porque siempre fuiste mi Oasis.

Una vez le pregunté a mi padre, si  yo  me parecía a mi  abuelita paterna Juana, a la cual yo adoraba y la miraba como un ejemplo de vida...
si yo había llegado a vivir mi vida con la fortaleza y virtudes que ella representó siempre... y la respuesta de mi padre me hizo entristecer...
-"No,  no eres como ella."   
 Pero mi padre adicionó enseguida,  -"Hija, comparada con mi propia madre, tú eres aún mejor."   

No tienes idea cuánto significó esa confesión de mi padre,  cuando ustedes  mis hijos eran pequeños,  algo muy valioso para el resto de mi vida. Nunca lo  he olvidado.

Hijo,  hoy soy  yo quien te deja  esta  confesión.. para que nunca la olvides...  

"Eres  mejor  padre  que mi padre y que tu padre. 
Los has sobrepasado.  Dios te siga bendiciendo."

Mamá