Hoy es un día especial, como son los días con Dios...
de Xiomara J. Pages
Sept. 18, 2011
Hoy es un día especial, como son los días con Dios, a pesar de que no siempre las cosas salgan bien, al menos, tenemos la convicción de que El nos lleva de la mano ó quizás en sus brazos.
Sandra mi hija cumple hoy 31 años. Pero Sandra no es la hija que camina, corre, conversa ó comparte un almuerzo en algún centro comercial conmigo. Otras madres tienen ese privilegio, y algunas dejan pasar la vida de sus hijas y no lo aprovechan. Mi Sandra está completamente postrada en una cama, con una rara enfermedad (RETT syndrome) que la va extinguiendo como una velita cada día. A veces me recuerda a una "Anne" Frank, la chica, alemana judia que escribió su famoso y conocido Diario, pues Sandrita está muy delgadita y jorobada, y se asemeja a una niña de aquellas de los Campos de Concentración Nazi. Sin embargo, su mirada es tierna y profunda, como sólo pueden mirar los ángeles.
En la mañana de hoy, muy temprano, me acerqué a la camita de hospital donde yace en su cuarto, y como hago a diario, busco señales que me confirmen que aún respira, que aún vive, que aún está entre nosotros. Y siempre me recibe con una sonrisa, como para asegurarme que ella continúa en mi vida.
La primera llamada apenas a las 9:00 de la mañana, no fue de su tía, ni de sus hermanos, ni de su padre, ni de sus primos, sino de una señora que desde Cuba, nunca se olvida de ella, y menos en este día. Esta señora leyó mi primer libro sobre Sandra en Cuba, "Mi Cruz llena de Rosas: Cartas a Sandra mi hija enferma" por allá por el 1996. En una tienda en Cuba, se lo vió en las manos a una empleada del lugar que ayudaba a un turista, y el título le llamó la atención, pues también ella tiene una hija postrada y ciega en una cama, con una traqueostomía y tubos para alimentarla , y curiosamente se llama Sandra como mi hija. Dios siempre guiándome en mi andar, me hizo pedirle a mi editor, poner en mis libros, mis datos personales para los que quieran contactarme. Esta señora Rosa María, así lo hizo y un buen día recibí su primera carta desde Cuba contándome cómo se tropezó con mi libro, y como al leerlo, allí sentada de un tirón, en un rinconcito de esa tienda de turistas en La Habana, le dí a través de sus páginas, más fuerzas para llevar ella también su cruz.
Desde entonces somos amigas por medio de cartas, e-mails o llamadas telefónicas. Cuando he podido le he enviado ayuda para su hija, o pañales o barritas de chocolate que tanto le gustan a su Sandrita, aunque ella jamás me ha pedido nada, sólo me brinda un cariño de hermana. En cada llamada, en cada carta o correo electrónico (que se las arregla para enviarme) ella me deja saber que nos piensa y ora por nosotras. A veces me llega una cartica ella a traves de alguien que fue de visita a Cuba, o me manda una postal por el Dia de las Madres, ¡que se yo!... pero me llena de detalles para que yo no me sienta sola, y eso no tiene precio en esta tierra.
Luego de hablar con Rosa Maria, entró una segunda llamada. Esta vez, de la primera nana o babysitter que tuvo Sandrita: Olga. Mi madre me ayudaba en el cuidado de mis hijos cuando yo salia a la calle a trabajar, y sobre todo con mi hijita enferma, , pero ella se enfermo de un desorden neurologico le faltaba la fuerza en los brazos. Tuve entonces que conseguir a una persona que la ayudara en su casa con Sandra al llegar de sus terapias. Así vino Olga a nuestras vidas. Un ser simple y amable, que sólo manifiesta bondad en todo lo que hace y dice. Olga tenía una hija enferma, retrasada mental, pero caminaba, y con ella venía a ayudarnos, hasta que un día su hija Olguita, empeoró y ya no pudo continuar con nosotros. Con el tiempo su hija enferma murió de cáncer, y esta madre quedó con el corazón destrozado. Mas, nunca se ha olvidado de Sandra, pues como ella misma dice, "puse en esa criatura todo mi amor".... Y cada 18 de Septiembre, su llamada segura me viene a recordar el gran ser humano que ella es.
Luego quedo yo sentada sola con mis pensamientos, frente a este ordenador, escuchando algunas canciones dedicadas por madres a sus hijas, y reflexiono en la mitad de mi vida dedicada a la mía, en cuerpo y alma. Dios le dió la vida, pero yo, su madre que la parió al mundo, le doy vida todos los días, sin escatimar en cuidados, gastos ni sacrificios. Ella en cambio me dá animos y deseos de vivir y de ser feliz y ayudar a los demás, a pesar de las penas y los sinsabores. Los médicos se sorprenden de verla aún viva todo este tiempo, sin haber tenido una sola escara en su piel que es tersa y suavecita, a pesar de su palidez, su delgadez y sus múltiples convulsiones, deformaciones y jorobas. Sandra es mi ángel, mi cruz y mis rosas, mi ancla y mi motor, el viento bajo mis alas, pero sobre todo Sandra es mi Redención.
Bendita seas Sandrita, te lo dice tu madre, con un corazón muy agradecido, hijita mía. Y aunque este misterio no lo comprendan muchos, siempre cuenta conmigo, con mis cuidados y mi amor. Lo volvería a hacer las veces que fuera necesario. Feliz Cumpleaños, mi Gordita. Gracias por todo lo que me has dado a pesar de tus limitaciones, y por las tantas lecciones que he aprendido junto a tí. Sólo le pido a Dios que no sigas sufriendo más de lo necesario, y que me dé fortaleza y entereza para seguir viviendo, contigo y después de tí. Tu Mamita.
Que hermoso escrito, cuanta delicadeza en tus palabras Xio, a veces no entendemos el andar en esta vida, pero Dios escoge una cruz para cada uno de nosotros, esta ha sido tu "CRUZ DE ROSAS" porque no importa las condiciones que un hijo traiga, siempre es una bendicion el tenerlo! ... Felicidades Sandrita!!!
ReplyDeleteFelicidades a Sandrita y al esfuerzo de su mami por mantenerla como una flor que vive en ese mundo, que quizás sea mejor que el el nuestro por la paz que se respira a su alrededor,un ano mas a tu lado Xio,felicidades para ti por ser ejemplo de madre y amiga.
ReplyDeleteDios escoge a ambos padres de niños especiales, sin embargo: fue a ti que dio la pujanza, el amor, la consagración y la ternura que has vertido en los cuidados de tu niña día a día por treinta y un benditos años, Amen de tu Fe Cristiana, que te a ayudado a llevar estoicamente tu “Cruz llena de Rosas”. ¡Feliz día de cumpleaños a Sandrita! Y muchas bendiciones para ti y todos los que amas.
ReplyDeleteTu amiga,
Dinorah C Rivas
Gracias a todos amigos por sus sentidas palabras....con ustedes, sigo adelante, porque en muchas formas todos me ayudan a cargar mi cruz de rosas....Bendiciones y gratitud...Xio
ReplyDelete